Amigas, la piel requiere mantener sus niveles de agua para conservar su elasticidad y cumplir con las funciones protectoras. La piel mantiene su humedad gracias al agua procedente de las capas más profundas y a la secreción normal del sudor. Debido a diversos factores, puede verse aumentada la pérdida de agua hacia el exterior, por ejemplo, la falta de sustancias que retengan el agua, la sequedad excesiva del aire, temperaturas agresivas de calor y frio o una función barrera dañada.
La capa córnea, la más superficial de la piel, es la que asegura la barrera de protección. Para ello necesita tener una adecuada cantidad de agua y de lípidos (elementos grasos). Cuando estos elementos se pierden, aparece la sequedad y la descamación.
Aparecen signos de deshidratación, como la aspereza, fragilidad, y apariencia opaca de la piel, además que pierde su elasticidad y brillo natural, por esto es tan importante compensar con productos que nos ayuden a restablecer este equilibrio, así evitaremos la aparición de signos prematuros de envejecimiento, como las molestas líneas de expresión.
¿Cómo saber si tu piel esta deshidratada?
- Puedes tener sensación de tirantez.
- Presentar escamas diseminadas por toda su superficie.
- Arrugas finas (estrías de deshidratación)
- Picor y escozor.
Es importante mantener una rutina de hidratación diaria, para evitar que estos signos causen alteraciones permanentes en la piel.
Una piel bien hidratada será siempre una piel saludable.
Para seleccionar adecuadamente un producto hidratante, basta con conocer las características de la piel, el biotipo cutáneo, las condiciones de sensibilidad o tolerancia a cosméticos, y la constancia será la clave.
Las Mascarillas Hidratantes Naori, son hechas a base de agua termal refrescante, no aporta elementos grasos, por lo que son ideales para cualquier tipo de piel.
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